2014/07/01

247197.- Oscuridad...


Veneconomia hoy

30 de junio de 2014

El mal que oscurece a Venezuela

El viernes 27 de junio, 15 regiones del centro y occidente del país, incluyendo la ciudad capital, volvieron a compartir simultáneamente la oscuridad debido a un apagón que afectó más del 60% del territorio nacional. La falla de gran magnitud se originó otra vez, según el ministro de electricidad, Jesse Chacón, en la estación La Arenosa, un eslabón crítico en las líneas que interconectan la represa del Guri con el centro y occidente de Venezuela.
También de nuevo, millones de venezolanos fueron víctimas al unísono del caos que genera la falla en el suministro eléctrico en las ya congestionadas zonas urbanas, interrumpiendo servicios de transporte masivo y telefonía, produciendo toda una anarquía en el tránsito terrestre, miles de artefactos eléctricos dañados y una angustia generalizada en la población que buscaba los medios para llegar a sus hogares sorteando la delincuencia desatada.
Un nuevo episodio de oscuridad crítico para los venezolanos, a pesar de que para millones de estos no es nada nuevo el estar sin luz, bien sea por los continuos apagones no programados que se generan en pueblos y ciudades del interior del país o bien por los racionamientos planificados por el ministerio que le compete garantizar el servicio. Es un hecho conocido que esos cortes eléctricos son una cotidianeidad en las regiones desde 2009, cuando le reventó en la cara a Chávez la crisis generada por años de desinversión en la ampliación y mantenimiento del Sistema Eléctrico Nacional, gracias a su visión de embarrar con un supuesto “socialismo del siglo XXI” todo sector o acontecer del país.
También los venezolanos vuelven otra vez a escuchar la cantaleta del gobernante de anunciar nuevas y “objetivas” investigaciones de la supuesta “extraña circunstancia” para ir a “la raíz” y determinar “si es falla por debilidad del sistema o falla humana, o una vez más es una falla programada, inducida por gente enloquecida", tal como lo anunciara Maduro luego de restituirse el servicio. Esta vez no se usó ni a la iguana ni al zamuro, ni al niño de muletilla.
Pareciera que nuevamente, el gobierno en sintonía con la onda del magnicidio y golpes que los ocupa en estos días, buscará irse por la tangente y retomar la tesis de saboteo, y así escabullir de responsabilidades a sus funcionarios y endilgarle los males de su gestión a la oposición, obviamente sin aportar pruebas.
La realidad es que al gobierno se le acabaron los argumentos y las excusas para explicar la profunda crisis en la generación, transmisión y distribución de la electricidad en Venezuela.
También se agotaron las respuestas que idearon desde 2009 para (y que) solventar los problemas del sector. La creación de un Ministerio dedicado a la Energía Eléctrica (octubre de 2009) y el inventar un Estado Mayor Eléctrico (febrero de 2010) no ha dado ningún resultado, solo generar más burocracia y mayores fuentes que esperan por un botín. Y los ingentes recursos que se destinaron al sector a través de los planes de emergencia eléctrica desde 2009, fueron dilapidados.
El país no aguanta postergar más las medidas necesarias para solventar la problemática eléctrica, para mañana es tarde.