2014/11/09

249061.- Espiritu critico.-

I

En días pasados, dos o tres, subíamos por la Avenida XYXJQ cuando de pronto nos vimos detenidos por una larga cola que, con nosotros en medio, siguió haciéndose cada momento más larga.
No avanzábamos ni un centímetro, de pronto y con virtudes epilépticas avanzamos un poco y nos acercamos a la esquina conocida como “los cuatro vientos”, allí el caos era mayúsculo, tal y como lo anunciaban las Redes Sociales, no había semáforos y no habían funcionarios de transito ni policías.
Decidí aprovechar la ocasión para fomentar el pensamiento crítico en mi compañero de paseo, mi sobrino de siete años.
Date cuenta, le dije, que esta situación es similar a la del país; al no existir quien gobierne, la gente busca hacer lo que tiene que hacer, a su manera, sin orden ni concierto y fíjate que lo único que se logra es el desorden mayúsculo, nota que la gente está molesta y están discutiendo entre ellos a ver quien pasa primero, sin excusas ni opiniones, están a punto de irse a las manos y pelear…
Pero mira a aquel señor, el de la franela blanca que tiene impresa la bandera del Estado nuestro, observa lo que está haciendo: dejó su carro y se plantó en el centro del cruce y está dirigiendo el transito, fíjate que la gente ya comenzó a hacerle caso y esta comenzando a fluir el transito, ya nos vamos a mover.
¿Qué te parece? Es lo que ocurre en cualquier grupo donde no hay gobierno, primero aparece la anarquía y “de inmediato” aparece alguien que toma las riendas y consigue que la situación retorne a la normalidad.-
Fíjate que ahora que empezaron a llegar los policías, lo primero que hicieron fue maltratar al Señor… ¿Sabes porqué lo hacen? Pues simplemente porque El ha demostrado que ellos no son necesarios, no son imprescindibles, y si no están presentes, cualquier vecino puede hacer su trabajo.-
Puede que te suene un poco duro, pero es la realidad cotidiana… si no hay Gobierno, siempre aparece quien haga sus veces… por eso los grupos que buscan hacerse con el poder, tratan de buscar gente “preparada” para colocarlos como candidatos a cualquier cargo, porque esa es la razón de ser de las autoridades, Prevenir el caos.
Si eso no existe, no valen la pena y por eso se les canta la Canción de “La Mucura” que “está en el suelo y no pueden con ella”.
II
Mañana de reunión en el (XXXXXXXXX XX XXX),  presentes los y las habituales.
Viene gente de la Capital y nos hablan de la ausencia de comunicación con los estamentos a los que pertenecemos, nos hablan del “olvido voluntario” al que somos expuestos. Nos hablan de la seguridad social refiriéndose “únicamente”  a los aspectos económicos. Diferentes intervenciones de los de allá y de los de acá, ninguna cuaja, no hay con qué, la culpa siempre es de unas personas a las que se les tiene miedo y, por eso, no se les encara.
Ya para finalizar, en el último minuto, habla un Abogado Defensor sobre un caso que implica a un futuro miembro del grupo. Da una explicación Legal, la suya,  sobre lo que le está ocurriendo al Sr. X. Explica la indefensión Institucional para con el Sr. X, explica “que ocurrió” y salta a la vista que es un cuento chino con pies, pero no cabeza.
No hay esperanza, asumimos lo que “cuentan” como si fuese el maná caído del cielo. No parecemos tener la edad que tenemos, nos volvimos ancianos sin crecer. Hay quienes se aferran a esa rama de árbol sin sombra que es lo único que les da sensación de pertenencia y de estar “con la cosa”. Dios nos perdone.