2015/06/24

263292.- Vanas esperanzas...



Doña Tibisay habló… y Maduro también 

Luego de largos meses de múltiples presiones de la oposición venezolana, de ex presidentes y parlamentarios hispanoamericanos y varios entes internacionales, Tibisay Lucena, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), habló este lunes 22 de mayo… y anunció la fecha, las normas y el cronograma de las elecciones parlamentarias. 

Lo anunciado se resume en: 1) Las elecciones se realizarán el 6 de diciembre de 2015, fecha cuando se cumplen 17 años desde que Hugo Chávez llegó al poder por la vía electoral. 2) El corte del Registro Electoral que regirá en esos comicios es para el 8 de julio. 3) Los límites de las circunscripciones electorales serán los mismos de las elecciones parlamentarias de 2010 (los cambios serán en el número de diputados ya realizado que resta cuatro diputados a la Unidad Democrática, actualmente con 66 escaños de los 165 que integran el Parlamento) y se mantendrá la misma estructura que utilizó en esa oportunidad el CNE. 4) La presentación de las candidaturas de las opciones electorales se realizarán entre el 6 y 7 de agosto. 5) La campaña electoral será entre el 13 de noviembre y el 3 de diciembre. 6) Solo se invitó a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para “acompañar” el proceso. 7) Y, para no variar en su falacia, ratificó que el sistema electoral venezolano es el más seguro del mundo. 

Con este anuncio de la señora Lucena se satisface una de las cuatro exigencias de Leopoldo López, Daniel Ceballos y los estudiantes al iniciar su huelga de hambre. Hoy López y los estudiantes dieron fin a su ayuno, una decisión sensata. Todavía queda pendiente la petición de que los comicios se realicen bajo la observación (no un simple acompañamiento) imparcial de la OEA y del Parlamento Europeo, la libertad de los presos políticos y el cese de la persecución y la censura a los disidentes políticos. 

Lamentablemente, el respirito que dio Lucena al sector democrático duro menos que un suspiro, pues esa misma tarde Nicolás Maduro también habló… 

El mandatario, enfrentado a unos comicios vitales para iniciar el rescate de la democracia, con los niveles de popularidad más bajos para el socialismo del siglo XXI, en estos 17 años, con una sostenida caída en los ingresos petroleros y la más grave crisis económica y social, se lanzó con un discurso agresivo, amenazante y con una violencia contraria a la convivencia democrática. Maduro, manifestó con talante altisonante y apelando a la estrategia de dominar con el miedo que, si la oposición llegara a tener una victoria en estas elecciones eliminaría las misiones y las ayudas sociales. Luego aseguró que "nuestro pueblo no se va a entregar, nuestro pueblo va a luchar en las calles, sea la que sea la circunstancia que nos toque enfrentar. Así lo digo, así lo asumo. Sería el primero en lanzarme en las calles con el pueblo a defender sus derechos sociales". 

Este es un discurso que podría catalogarse de incendiario y demostrativo de que el oficialismo está negado a resolver la crisis política- social y económica por la vía constitucional y democrática. ¿O es un discurso que esconde el temor de ser vencido con contundencia por una población que agobiada por el colapso del país le pasará factura retirándole su apoyo electoral? 

La interrogante es ¿qué queda ahora a la población democrática que aspira el cambio de ruta? ¿Qué pasos dará la dirigencia democrática para garantizar unas elecciones donde se respete la decisión de la mayoría? 

El trabajo que queda por hacer no es fácil, pero no es imposible. El concurso de todos remando juntos y al mismo tiempo en dirección correcta es el mandato para que en enero de 2016 se inicie, con una nueva Asamblea Nacional, plural y representativa de todos los sectores de la sociedad venezolana, el arduo trabajo de recuperación del país. ¡Manos a la obra! 

Editores de VenEconomía